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Este lunes 21 de abril de 2025, el mundo se despertó con la dolorosa noticia de la muerte del Papa Francisco, a los 88 años, en su residencia del Vaticano.
Pero en Córdoba, su partida tiene una resonancia especial: fue aquí donde Jorge Mario Bergoglio encontró refugio, silencio y consuelo en una etapa determinante de su vida.
El tiempo de exilio y transformación en Córdoba
Entre 1990 y 1992, Bergoglio residió en la Residencia Mayor de los jesuitas en Córdoba, apartado de sus funciones en Buenos Aires.
Allí se dedicó a confesar, a acompañar espiritualmente y a redescubrir su vocación pastoral.
Años después, ya como pontífice, rememoró esa etapa como un tiempo de aprendizaje profundo y de reconstrucción interior.
Un legado que perdura en la Iglesia cordobesa
En 2021, Francisco designó arzobispo de Córdoba a su amigo personal, el jesuita Ángel Rossi, consolidando su influencia espiritual en nuestra provincia.
Desde entonces, el mensaje de cercanía, humildad y compromiso social de Francisco encontró eco en cada rincón de la diócesis.
Hoy, tras conocerse la noticia de su fallecimiento a las 7:35 a.m. en Roma (2:35 a.m. en Argentina), cientos de cordobeses se acercaron a la Catedral a despedirlo con oraciones y velas encendidas.
San Lorenzo y una coincidencia cargada de símbolos
Fanático de fútbol, Francisco fue socio vitalicio de San Lorenzo de Almagro, el club de sus amores, con el carnet número 88235N-0.
Un dato que hoy adquiere un valor simbólico singular: el 88 por su edad al morir, y la hora de su fallecimiento, a las 2:35 a.m. en Argentina, números que también figuran en su carnet de socio.
Una coincidencia que conmueve a los hinchas cuervos y a los fieles que lo siguieron durante su papado.
Un dato de color: la quiniela y una señal inesperada
Como si el destino hubiese querido dejar una marca, este lunes a la mañana en la quiniela de Córdoba, sorteo de la Primera de la Mañana, salió a la cabeza el 7688.
El 88 representa al Papa en la quiniela y el 76 fue la edad con la que Jorge Bergoglio asumió como Sumo Pontífice en 2013.
Un dato curioso que rápidamente se viralizó en redes y grupos de WhatsApp cordobeses.